Sanando heridas tóxicas en la relación de pareja

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Resumen de “Healing Toxic Injuries in the Relationships” por Dra. Sue Johnson
Traducido por : Lic.Ps.Sybila Latorre

Sue Johnson con más de 30 años de experiencia clínica exitosa con parejas dice: “En mi práctica clínica he visto lo duro, costoso y difícil que es recuperarse de las heridas que la relación de pareja produce. Desde: infidelidades, traiciones económicas, afectivas, fracaso a la hora de ser sostenidos o sentirnos seguros y acompañados en tramos extremadamente dolorosos o exigentes de nuestra vida por parte de nuestra pareja”.

Agrega que: “es clave por supuesto el tema del perdón, a la hora de ver la sanación de las heridas toxicas. Pero no podemos hablar del perdón forzado ni a nivel cognitivo”. Ella reseña que ha visto que esto no permite sanar, ni crear una nueva fase de confianza.


Para poder alcanzar esa fase de perdón, según la Terapia Centrada en Emociones (EFT), es necesario procesar emocionalmente, todo lo que el incidente que dañó la relación de confianza y seguridad produjo. La Dra. Johnson cree que EFT es muy efectiva lidiando con este tipo de situaciones según su experiencia clínica.

Menciona: “Esto implica tomar contacto con las propias emociones y las del otro, poder expresarlas y sentir que el otro las recibe y puede ponerse en mis zapatos, aunque sea por unos instantes. Esto permite ir reconstruyendo un vínculo de seguridad. Que lentamente va dando espacio a la reconstrucción de la confianza. Algo esencial antes de que el perdón acontezca o incluso cuando este no se puede presentar hasta muy avanzado el proceso”.

El perdón sería una consecuencia del proceso de reconstrucción genuina y duradera de la confianza en la relación.

Ella ha tomado en cuenta dos estudios a nivel de estas heridas y el perdón. Un estudio basado en el encuadre Integrativo para tratar la infidelidad (CBT), de Douglas K. Snyder y Donald H. Baucom. Este se basa en la reconstrucción de la relación a partir del perdón, de una determinada estrategia comunicacional, de la aceptación y el entendimiento del significado de las heridas. Esto es diferente a lo que propone la Terapia Centrada en Emociones.

En el otro estudio basado en la Terapia Centrada en Emociones (EFT), se observa como esencial concentrarse en el contacto, y el procesamiento juntos de las emociones difíciles. Lo cual promueve nuevamente la reconexión emocional, el vínculo seguro y por tanto la restauración de la confianza.

En este segundo estudio, que se realizó con el enfoque EFT sobre el Perdón, el 65 % de las parejas que acudían a terapia presentaban profunda angustia, estaban estancadas, producto de lesiones ocasionadas por la relación misma. Y ella se pregunta "¿Se puede realmente alcanzar el perdón, aprender a abrirse y volver a confiar el uno en el otro de nuevo?".  Se veía que luego de trabajar el tiempo necesario podían trascenderse estas heridas (que podia ser desde 8 meses con entrevistas semanales a un poco más de tiempo, según la situación). Este mismo 65 % de las parejas tres años después, mantenían ese estado de logro (estaban estables en ese funcionamiento armónico alcanzado). Esto llena de esperanza y da fuerza y coraje para seguir trabajando.

Muchas de las parejas que no estaban dentro de ese 65% terminaron la relación, habiendo mejorado. No se puede decir que se terminó con la lesión, ni que realmente se perdonó, ni que se reparó completamente el vínculo. En muchas de estas parejas, los miembros de ella se sentían gravemente heridos mutuamente. Analizando estos resultados a posteriori de la investigación, los investigadores se dieron cuenta de que tal vez no habían trabajado el tiempo suficiente con la pareja (más de 30 sesiones que era lo estipulado en este estudio).

En los casos de parejas con angustia severa, debido a heridas de la relación, es importante ver que son muy profundas, muy dolorosas y difíciles de sanar. Sin embargo con el tiempo suficiente, si ambos miembros de la pareja lo desean y se comprometen honestamente, con el encuadre apropiado pueden sanarse.

La Dra. Johnson menciona que “Las heridas de relación son trauma con “t” minúscula, porque desde el punto de vista de la teoría del apego, no es verdaderamente un trauma, es una situación que los torna IMPOTENTES (DESOLADOS). De repente uno de los miembros de la pareja o ambos encuentra que la persona de la que depende (en la relación) no puede realmente sostenerla, apoyarla. La persona cree que la solución frente al miedo, es la fuente misma que produce miedo. Esto desestabiliza completamente a la persona, la confunde, crea una sensación de impotencia. Lo cual es la definición principal de trauma. La esencia del trauma es la IMPOTENCIA (la desolación frente a una situación profundamente impactante)…”.

Agrega: “Pensamos en este tipo de heridas como TRAUMAS DE RELACIÓN. A diferencia de las heridas combinadas que tienen todas las parejas que vienen a consulta, lo cual los ha herido por mucho tiempo. Estoy hablando (cuando menciono trauma de relación) cuando una persona fue herida y aparecen uno o dos incidentes particulares que se destacan completamente del resto. Son como bombas de tiempo, que salen de la relación y sabotean todo intento de la pareja de estar abiertos y de intentar confiar el uno en el otro”.

Estas no son heridas que se puedan reparar fácilmente, ni son padrones de interacción negativos. Son realmente traumas específicos. Si le preguntan a la Dra.Sue Johnson cuantas parejas sufren estos traumas, ella diría que entre un 30% y un 40% de las parejas que realizan consultas por terapia.

Por supuesto que hay heridas traumáticas que son más significativas que otras, pero: con el tiempo suficiente, el profundo deseo, el compromiso de ambos miembros de la pareja de sanarlas y el encuadre adecuado, es posible hacerlo.

¡Aún hay esperanza para un gran número de parejas en esta difícil y dolorosa situación!